Vivas: "El Parque Marítimo marcó un antes y un después en Ceuta"
- Parque Marítimo del Mediterráneo

- 21 jul
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El presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Juan Vivas, ha presidido este martes el acto conmemorativo del 30 aniversario del Parque Marítimo del Mediterráneo, una cita emotiva celebrada en el propio recinto que ha servido para rendir homenaje a su autor, César Manrique, y para destacar la trascendencia de esta obra en la historia reciente de la ciudad.
Durante su intervención, Vivas subrayó que el Parque supuso “un punto de inflexión para Ceuta”, marcando una de las grandes transformaciones urbanas del territorio. “Han pasado tres décadas y esta creación ha dejado de pertenecer solo a su autor para convertirse en una joya colectiva, parte del patrimonio inmaterial de todos los ceutíes. Todos presumimos de ella y nos sentimos profundamente orgullosos”, afirmó.
Manrique eligió Ceuta por vínculos personales
El presidente recordó que cuando César Manrique aceptó el encargo de proyectar el Parque, ya era un artista de reconocido prestigio internacional. Y sin embargo, eligió Ceuta, según Vivas, por dos razones fundamentales: el afecto que guardaba a la ciudad tras su paso por el servicio militar en las Escuelas Prácticas del Hacho, y la singularidad del espacio disponible, “un lugar abierto, amplio y céntrico” que encajaba con su visión creativa.
“Manrique lo consiguió”, señaló Vivas. “El Parque Marítimo es hoy una alegoría viva de Ceuta, un reflejo simbólico de su identidad marinera, diversa y valiente”.
Un Parque que interpreta a Ceuta
El propio nombre del recinto, Parque Marítimo del Mediterráneo, elegido por el artista, resume esa conexión con el entorno natural y marino. “Aquí está el agua, el cielo, la luz, el faro, la brisa y el aroma del mar”, evocó Vivas, citando al poeta Luis López Anglada:
“Ceuta parece una niña dormida sobre los brazos del mar, que tiene por almohada la espuma de las olas”.
El presidente destacó también los “atardeceres rojos y noches azules” que Manrique quiso capturar, así como la armonía entre contrastes que define tanto la obra del artista como el espíritu de la ciudad.
Símbolos de historia y fortaleza
Vivas se detuvo en los elementos arquitectónicos y artísticos del recinto, destacando su profundo simbolismo.El castillo central, explicó, evoca las Murallas Reales y el carácter resistente del pueblo ceutí. La escultura móvil sobre la cascada, en cambio, simboliza la dualidad entre la firmeza en lo esencial y la capacidad de adaptarse al cambio.Incluso las duchas en forma de garita aluden al vínculo histórico con las Fuerzas Armadas, reforzando la identidad y memoria colectiva de la ciudad.
Una obra nacida de la lealtad y el compromiso
El presidente recordó que César Manrique falleció antes de ver finalizado el proyecto, pero la ejecución fue fiel a su visión original gracias a una dirección técnica de “altísima categoría”, compuesta por José Luis Orcina, Juan Alfredo Amigó y Juan Orozco.
La construcción del Parque no estuvo exenta de obstáculos: requería una compleja tramitación administrativa, financiación europea (FEDER) y superar el escepticismo inicial. Aun así, el proyecto salió adelante gracias al esfuerzo de un grupo de personas a quienes Vivas quiso rendir homenaje por su “entrega, profesionalidad y calidad humana”:Nicolás Fernández, José Diestro, Jorge Martínez, Pepe Torrado, Luis Salinas, Hossain Mohamed, Mohamed Kaddur, Mercedes Gómez y Cristóbal Serrán, entre otros.
Un legado que trasciende la política
Vivas destacó que “las grandes obras deben trascender la alternancia política”, recordando que el Parque Marítimo ha sido un proyecto común a cuatro alcaldes:con Aurelio Puya se produjo el primer contacto con Manrique; con Fructuoso Miaja, la redacción y aprobación del proyecto; Francisco Fráiz adjudicó e inició las obras; y Basilio Fernández culminó su construcción con la inauguración oficial.
Desde entonces, añadió, la Ciudad ha mantenido el compromiso de conservar el recinto con los estándares de calidad originales, tarea que hoy recae en el consejero Nicola Cecchi y su equipo.
Manrique, símbolo de ilusión y esperanza
El acto concluyó con un mensaje cargado de emoción. Vivas definió a César Manrique como un “entusiasta de la vida”, un hombre que “amaba la belleza y luchaba contra la resignación”.
Pidió que este aniversario sirva como reclamo de ilusión y esperanza, y como impulso hacia la Ceuta del futuro:
“Una ciudad moderna, avanzada, de prosperidad y progreso, que los ceutíes merecen”.
Con esas palabras finalizó un discurso que, más allá del recuerdo, reafirmó el valor del Parque Marítimo del Mediterráneo como uno de los grandes emblemas de Ceuta, símbolo de arte, naturaleza y orgullo colectivo.




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